martes, 27 de febrero de 2018

Memoria flamenca. AURORA VARGAS VARGAS ‘AURORA VARGAS (y II).

 “YO CREO QUE EL CANTE SERIO Y PROFUNDO NUNCA SE OLVIDA.”

Una de las cuestiones que más me llamaban la atención sobre la trayectoria profesional de ‘Aurora Vargas’, era la ausencia de grabaciones que la sevillana tenía siendo máxima figura de los festivales flamencos de la época. Más de veinte años triunfando y sin ninguna muestra discográfica en el mercado, resultaba raro. Por esos aspectos continuó mi entrevista a la cantaora en 1998.

¿Por qué has grabado tan tarde?
-“Primeramente porque en honor a la verdad, es que tampoco me ha hecho falta. Cuando he ido a los festivales he ‘procurao’ siempre sembrar, poner mi granito de arena, dar todo lo que soy y más. También he ‘tenío’ la suerte de inaugurar ‘Canal Sur’ y eso me dio popularidad y, creo que siempre que he ‘estao’ en un sitio de estos no lo he hecho mal. Luego resulta que las casas discográficas no te lo ponen tan fácil. Siempre se muestra un poco egoístas, tirando más ‘pa’ ellas que ‘pa’ los artistas y el arte. Y no ‘too’ se puede dar.

¿Exigen comercialidad?
-“¡Sí! Las casas argumentan que el flamenco es para una minoría y quieren un mercado más amplio. También dicen que de esta forma se integra a la juventud. Y la verdad es que yo tengo un hijo con dieciséis años que, a pesar de todo, a quien escucha es a Juan Talega, ‘La Perla de Cádiz’ Pastora… Y ‘toos’ los días viene con una cinta nueva de ‘toa’ esa gente. Escucha a ‘Camarón’ y de ‘Camarón’ se pasa a Juan Talega, y luego a ‘Chocolate’ y a ‘Mairena’. Tengo otro con diez años que no sabía quién era ‘Chocolate’. Estaba jugando con el video-juego y sonaba ‘Chocolate, y me preguntó ¿Quién es el que canta? ¡’Chocolate’! Pues me gusta el eco que tiene…” Por eso te digo que si a veces se integra a la juventud al flamenco con algo comercial en los cantes, pues tampoco está mal.”

Aurora Vargas
con la guitarra de 'Niño de Pura'
y las palmas de 'El Bobote' y 'El Eléctrico'
¿Alguno de tus hijos va para artista?
-“¡Hasta ahora no! Pero el de dieciséis años… ¡Bueno…! Mis niños tienen el oído musical perfecto. Cuando traen las notas de las clases de música son sobresalientes totales, porque el oído musical es perfecto. Mi niña canta y baila ‘pa’ nosotros. El que tiene dieciséis años, sí. Canta y además bien. Y nosotros lo escuchamos sin que se entere, porque es tímido, le da vergüenza. Pero no canta como los niños de hoy, aunque le gusta también lo moderno. El, lo que escucha es flamenco puro.”

¿Es verdad que nunca se dominan los nervios antes de subir a un escenario?
-“¡Nunca! Cada vez te dan más porque es más la responsabilidad que se tiene. Yo he ‘actuao’ hace poco en el Teatro “Lope de Vega”, en el ciclo que ha ‘organizao’ Cultura de la Junta durante dos días, y las dos veces como un flan. Cuando terminé el primer día, el cual tuvimos un gran éxito, me sentí muy satisfecha. Entonces, cuando llegó el segundo, pues más nervios todavía. Y es que tú misma te lo pones difícil. Si eres una persona responsable no puedes estar tranquila.”

¿Estás satisfecha de tu disco? ¿De quién fue la iniciativa de hacerte acompañar con otros instrumentos diferentes a la guitarra?
-“Sí que estoy satisfecha de mi disco. ¡Bastante! Aunque siempre te exiges más. Y en cuanto a la iniciativa de los otros instrumentos, en parte surgió de la casa grabadora porque pensamos que tampoco se puede hace ‘too’ un disco entero de flamenco puro. Yo no puedo grabar un disco sólo ‘pa’ nosotros, los puristas. Porque yo soy purista cien por cien. Lo que escucho en mi casa es ‘too’ pureza, a la gente más antigua. Escucho a ‘La Perla’, a la ‘Niña de los Peines’, a ‘Mojama’, a Tomás… No te puedes ajustar ahí cuando sales al ‘mercao’. He hecho cinco temitas ‘pa’ los más flamencos y otros cinco temitas más comerciales.”

¿La importancia de esos instrumentos conforme va pasando el tiempo, le va a ayudar en algo al flamenco?
-“Yo creo que sí. Yo no me salgo del flamenco. Los dos tangos y las bulerías son flamencas. Además, ‘toa’ la ‘vía’ ha ‘habio’ instrumentos. ‘Caracol’ fue uno de los que más trató por ahí. Había una gitana, Amina, que no se podía cantar más flamenca que cantaba esa mujer… Y sus hermanos, flamencos cien por cien, uno le tocaba el violín y el otro el acordeón. Yo creo que el cante serio y profundo nunca se olvida. Piensa que cuando estás en una reunión flamenca no hay instrumentos y a veces ni hasta guitarra, y cantas al golpe, que es como se ha ‘cantao’ ‘toa’ la vida. Lo que sí vuelvo a decirte es que de esta forma la juventud se integra más, se aficionan los que no lo son. Y no defiendo esto porque yo haya ‘grabao’ así, si no porque se ha visto con otros artistas anteriores como ‘Camarón’ y muchos más.”

Aurora Vargas en la Peña Flamenca de Jaén
(foto: Pepe Pamos)
¿La Niña de los Peines?
-“¡Me encanta! Además, en todo lo que ha hecho. La escucho, la jaleo y hasta me rio de lo feliz que me encuentro.”

¿Manuel Torre?
-“¡Un fenómeno!

¿Chacón?
-“Otro fenómeno en lo suyo.

¿Camarón?
-“¡Un fuera de serie! Yo creo que lo ha ‘dejao’ ‘too’ hecho y lo ha ‘demostrao’. Ha ‘sío’ un revolucionario del flamenco. Uno de los mejores de este siglo. Yo le he ‘escuchao’ cosas cuando él tenía catorce años, grabaciones por siguiriyas, y no se podía tener más conocimiento que tenía él del cante. Además tiene una discografía completa, donde demuestra que ha ‘cantao’ por ‘toos’ ‘laos’.”

¿Te has presentado en algún concurso?
-“¡Nunca!”

¿Por qué?
-“Porque la verdad es que no me ha hecho falta para darme a conocer. He ‘tenío’ la suerte de participar en muchos festivales y en los más importantes, y no he ‘necesitao’ la promoción de un concurso.”

¿Cómo ves el futuro del flamenco?
-“En un buen momento. Hasta creo que se le puede comparar con lo que conocemos como la época de ‘Oro del Flamenco’.”

Rafael Valera Espinosa



lunes, 26 de febrero de 2018

Por soleá. VENANCIO BLANCO. FLAMENCO Y TAURINO.

Ha muerto mi amigo Venancio Blanco Martín. Académico numerario de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando. Su obra se encuentra en diversos museos nacionales y extranjeros como los Museos Vaticanos, Museo Nacional de El Cairo, Museo de Bellas Artes de Amberes, Museo de Bellas Artes de Salamanca, la Catedral de la Almudena o el Museo de Arte Reina Sofía, en Madrid, etc.

No es mucha la historia de nuestra relación, pero sí bastante intensa en una determinada época. Yo conocía algo de su arte por la serie de trabajos que aportó a la revista ‘Candil’, como portadas (‘Cante’, realizada en bronce y publicada en el número 21; ‘Marcando el compás’, también en bronce en el ejemplar 36) e ilustraciones en números como el de ‘Paco de Lucía’, o la portada del número 100, ‘Por bulerías’, la cual me regaló durante la celebración del XIV Concurso de Córdoba, en 1995.

Coincidimos en el XIII Certamen cordobés el año 1992. Era el artista-escultor invitado desde hacía bastantes ediciones del mismo porque sus esculturas premiaban artísticamente los especiales ‘Silverio’ (Al cantaor o cantaora más completo), Antonio (Al bailaor o bailaora más completo) y ‘Ziryab’ (Al guitarrista más completo). A partir de aquella primavera, Venancio Blanco me fue enseñando arte, compostura profesional, sosiego en mis decisiones en el jurado, a la vez que nos confirió –a mi mujer a y mí- una amistad hermosa en compañía de su mujer María Pilar Quintana, pues casi siempre nos juntábamos al lado de ellos, de ‘Fosforito’ y su esposa Maribel, en las comidas y tertulias pertinentes de los miembros del jurado.

Se ha escrito mucho sobre su formación, sus premios y sus inclinaciones místicas:

Fue un genio en constante ebullición y caracterizado por una inquietud a la que no dio tregua hasta los últimos años de su vida, donde siguió dibujando y exponiendo como homenaje a algunos de sus cómplices: Teresa de Jesús, San Juan de la Cruz y el caballero Don Quijote.”

Mas, he de señalar que yo lo veía como un escultor de flamencos y del mundo taurino. Nunca se me olvidará como en el patio de butacas del ‘Gran Teatro’ cordobés abría su bloc de dibujo y con su colección de rotuladores iba esbozando formas, posturas, movimientos y hasta –así lo intuía- compases y ‘quejíos’ de los protagonistas que visionaba y escuchaba en el escenario del teatro. A veces, cuando él consideraba que el boceto-dibujo era enseñable, a pocos nos lo presentaba para deleite nuestro.

Escribe en ‘El País’ su hijo, Venancio Blanco Quintana que su padre le inculcó que

El dibujo te enseña a mirar, para aprender a ver”,

y que

La naturaleza muere, pero la belleza se desprende de la muerte y da paso a otra belleza. La belleza nunca muere.”

Como nunca morirán nuestros recuerdos de prestantes veladas flamencas y tertulias junto a él “De momentos vividos de gracia y humor”, como expresa en su dedicatoria del dibujo ‘Por bulerías’.


Rafael Valera Espinosa


lunes, 19 de febrero de 2018

Por soleá. "FLAMENCOLOGÍA". ANSELMO GONZÁLEZ CLIMENT.

A veces la creación es más conocida que el propio autor, circunstancia que generalmente se produce más en las artes que en las ciencias. Este es el caso de nuestro protagonista del día de hoy, el cual publicó en 1955 un tratado muy certero sobre el flamenco que tituló Flamencología, término que quedó acuñado a partir de entonces para definir la ciencia de los estudios en torno al arte flamenco, aunque siempre han existido autores que no han estado de acuerdo con el vocablo. 

Anselmo González Climent, creador del libro, fue un autor argentino de padres nacidos en San Roque (Cádiz), pueblo en el que pasó grandes temporadas. El libro es de capital importancia para el flamenco y también para los toros, según expresan numerosos y prestigiosos analistas de ambas artes. Fue a raíz de su lectura por parte de Ricardo Molina Tenor, cuando éste (artífice de la institucionalización del Concurso Nacional de Arte Flamenco de Córdoba de 1956) busca la amistad del argentino para estructurar el citado concurso.

Junto con el poeta de Puente Genil, Anselmo se erigió en alma del referido Concurso hasta la III Edición de 1962, en la que se le entrega ‘La Llave de Oro del Flamenco” al mairenero Antonio Cruz García ‘Antonio Mairena’, lo cual significó la casi total ruptura de la relación entre ambos escritores, entre otras circunstancias porque Ricardo Molina defendía el gitanismo de la escuela ‘mairenera’ influenciado por Antonio y Juan Talega, y Anselmo se inclinaba más por la escuela gaditana que representaban grandes figuras como ‘Enrique el Mellizo’, Enrique Ortega ‘El Gordo’, ‘Curro Dulce’, don Antonio Chacón… aleccionado por Aurelio Selles.

Tal fue la importancia del libro ‘Flamencología’ que su prologuista, el gaditano y escritor José María Pemán expresó:

"He aquí un libro para el cual, si su autor no me hubiera pedido tan amablemente un prólogo, creo que yo hubiera solicitado e intrigado hasta conseguir el honor de escribirlo".

Mas, no solo Anselmo González Climent escribió ‘Flamencología’; también fue autor de ‘Oído al cante’, ‘Bulerías’, ‘Antología de la poesía flamenca’, ‘Pepe Marchena y la Opera Flamenca y otros ensayos’, o ‘Cante en Córdoba’, amén de otros trabajos literarios y de investigación como la enciclopedia ‘Historia de la Marina Mercante de Argentina’. A raíz de la celebración del XIII Concurso Nacional de Arte Flamenco de Córdoba de 1992, se publicó un volumen bastante clarificador de los entresijos que rodearon el de la ‘Llave de Oro’ treinta años antes, con el título ‘Cartas de Ricardo Molina a Anselmo González Climent’, gracias a la colaboración de la Peña Flamenca de Jaén, depositaría de bastantes documentos literarios del autor argentino.

Igualmente, la revista Candil publicó por entregas otro apreciado volumen que no llegó a editarse como tal, bajo el título ‘Viejo carnet Flamenco’. Una transcripción de las entrevistas que en su día Anselmo González realizó a los más señeros cantaores de la época.

Este año se cumplen 20 de su fallecimiento. Su recuerdo es capital.


Rafael Valera Espinosa

jueves, 15 de febrero de 2018

Memoria flamenca. AURORA VARGAS VARGAS ‘AURORA VARGAS’ (I).

 ‘TOMÁS EL NITRI’, PRIMERA ‘LLAVE DE ORO’, ERA TÍO DE MI ABUELO MANUEL VARGAS

Estaba en todo su apogeo cantaor. Era figura imprescindible en los festivales de más prestigio y renombre, y lo sigue siendo en la actualidad. Vino a Jaén un abril de 1998 para certificar con su flamenco el 27 aniversario de la fundación de la Peña Flamenca capitalina. Antes se había erigido en primera figura de nuestro arte por su compás, dominio del escenario y entrega flamenca, a lo que también se sumaba su garra artística para atraer a la totalidad de los aficionados flamencos de la época.

Esta fue mi presentación en el número 115 de ‘Candil’ de marzo-abril del citado año:

Se sienta con serena elegancia y te escruta el rostro con simpatía y seriedad, a la vez, como intentando intuir por qué derroteros se va a desarrollar la entrevista. En su ánimo se aprecia que no es mujer de polémicas ni confrontaciones artísticas. Defiende a ultranza su personal arte y no quiere significarse en favor ni en contra de otros. Solo cuenta para ella la grandeza del arte flamenco, su arte, y de quienes saben interpretarlo.

De una belleza racial, más exultante cuanto más acerca su rostro para insistir en sus afirmaciones, ‘Aurora Vargas’ es mujer capaz de plasmar con rotundidad sus criterios sobre nuestra música con expresiones matizadas de enérgica dulzura, que a veces te desarman ante la frescura de sus respuestas.

Quién no la conozca en un escenario –cosa algo insólita en la actualidad- no puede figurarse que la cantaora sevillana, tras mantener una sencilla y grata conversación, puede derrochar tanta alegría, coraje, fiesta y compás en sus actuaciones. Orgullosa de sus ancestros, entre los que se encuentran ‘Tomás El Nitri’, ensalza el arte fragüero de su rama materna y fantasea, con motivos, sobre el futuro devenir artístico de su hijo mayor.”

Pregunta: ¿Cómo son tus inicios?

Respuesta: - “Pues, desde chiquitita.”

P: ¿En Triana?

R: - “¡No! No soy de Triana. Quiero a Triana, admiro a Triana y venero a Triana. Nací en el barrio de ‘La Macarena’ y me bautizaron en San Román, en la pila que hay delante del Cristo de los Gitanos. Iba en un capote torero.”

P: ¡Olé! ¿De quién?

R: - “De mi padrino, que en aquél tiempo era novillero. Después con siete u ocho años nos fuimos a vivir a Triana. Allí me he criao y he conocio a toa la gente de arte de Triana.”

P: ¿Quién ha cantao en tu familia?

R: - “Mi madre; la hermana de mi madre que se llama ‘María Vargas’; mi abuelo también cantaba; mi bisabuelo… La primera Llave de Oro del Cante, que fue ‘Tomás El Nitri’, era tío de mi abuelo Manuel Vargas. Mi madre es de Sanlúcar de Barrameda y por ahí me viene a mí el cante. Cristobalina, mujer de Miguel ‘El Funi’, también es familia mía, concretamente prima hermana de mi madre. Mi familia, además de ser de artistas, también es una familia de saber cantar y bailar y amar una juerguecita flamenca de esas que formamos nosotros.”

P: ¿Cuándo comienzas a ser cantaora profesional?

R: - “Pues desde que tenía catorce años, que fue cuando me descubrió Pulpón en una Feria de Sevilla. A partir de ahí me contrataron –por medio de él- en ‘Los Canasteros’; más tarde estuve en ‘Los Gallos’, y después nos fuimos a Japón.”

P: ¿Has cantao para bailar?

R: - “Yo siempre he sío cantaora d´alante desde que empecé. Lo que pasaba es que si tenía que cantar a una figura del baile, pues le cantaba, como a ‘Rafael el Negro’, cuando estaba en ‘La Cuadra’ antigua, que era muy chiquitita. Allí estaba la ‘Familia Montoya’ con ‘Lole’ incluida. Yo alternaba con casi todas las grandes figuras que hay hoy en el flamenco. Me acuerdo que estaba ‘La Paquera’, Angelita Vargas…”

P: ¿Cuándo se produce tu despegue artístico?

R: - “A partir de una Quincena Flamenca de Sevilla, que se celebró en el Teatro “Lope de Vega”. Ese teatro ha sío siempre mi talismán. Cada vez que he actuado en el Lope de Vega he tenio un éxito resonado. Luego fui a la Cumbre Flamenca de Madrid donde también triunfé, y a partir de aquí comencé a meterme en los festivales, y hasta hoy.”

P: Aurora Vargas’ es una cantaora conocida sobre todo por su arte en los estilos festeros… ¿Y las siguiriyas, los martinetes y las tonás…?

Aurora Vargas entrevistada por Rafael Valera
(foto: Pepe Pamos)
R: - “¡Hombre! ¡También! Ten en cuenta que la siguiriyas son unos de los cantes que yo siempre los he escuchao en mi casa. Y de hecho también he cantao en festivales el martinete y la toná. Sin embargo, yo siempre he tenío respeto por mis compañeros. Tú sabes que tanto ‘Menese’ como ‘Manolo Mairena’, con los que coincido en festivales, cantan con calidad por esos palos y yo siempre respeto a mis compañeros. Pero te repito que he escuchao a mi gente cantar muy bien por esos cantes, porque mi gente son toos de la fragua. De hecho, todavía tienen la fragua en Sanlúcar. El abuelo de mi madre cantaba por siguiriyas como nadie. Existe un disco que hizo mi tía Cristobalina, y detrás, en la presentación, refiriéndose a mi abuelo, se dice: ‘Cuando ‘Juan el Bizco’ estaba en la fragua cantando por siguiriyas, los gitanos del barrio alto se emborrachaban de manzanilla’. Con esto te quiero decir que en mi gente se ha dao muy bien ese palo. Mi madre canta por siguiriyas pá reventar, pues escuchaba en la fragua a su padre y a su abuelo.”

P: ¿En qué estilo te encuentras más a gusto?

R: -”Cuando estoy en el escenario con los cantes que me identifico. Pero cuando estoy con mi familia, el cante que más me gusta es la siguiriya.”

Rafael Valera Espinosa

martes, 13 de febrero de 2018

Por soleá. VILLANCICOS FLAMENCOS (y II).

Villancicos 2017
Se piensa que el villancico flamenco suele cantarse por los estilos festeros, criterio bastante parco del tratamiento que este arte ofrece de las letras navideñas. Aunque es menester apuntar que es, generalmente, por esos estilos por donde mejor cuadran y más se han popularizado como expresé en la pasada columna. Sin embargo, cantaores como Manolo Vargas, Pepe el Culata, Paco Toronjo, Bernardo el de los Lobitos o Pericón de Cádiz, los abordan por tanguillos de Cádiz, alegrías, tientos, martinetes, soleares, fandangos de Huelva, sevillanas, verdiales, bulerías, peteneras y malagueñas.

Los villancicos flamencos se interpretan principalmente en Andalucía, Extremadura, Castilla-La Mancha, Murcia y Cataluña. Es decir, el mundo geográfico principal de este arte. Pero, como sucede en muchos de los aspectos del flamenco, existen determinadas comarcas en las que son más populares. Ateniéndonos a la serie de trabajos realizados sobre el tema, las principales provincias en las que se cantan con más asiduidad, a la par que mantienen una mayor creatividad son las de Sevilla, Cádiz, Jaén y Córdoba.

En la tierra jiennense destacan las ya citadas localidades de Andújar y Linares, aunque hay que sumar igualmente las de Jódar, Torredelcampo y hasta la propia capital. En este contexto, siempre hay que tener en cuenta la tradición difundida por Rafael Romero “El Gallina” de los villancicos de su tierra, la cual ha sido muy valorada por los estudiosos a la hora de elaborar cualquier tipo de trabajo en este sentido, a veces con indicaciones de connotaciones folclóricas, con determinada razón.

Mas, nuevamente, salen a relucir los centros cantaores de Sevilla y Jerez, como principales comarcas en las que se han desarrollado creatividad y solera para abordar el villancico flamenco. Es lógico por ser ciudades en las que posiblemente más artistas hayan nacido y generalmente los más creativos. Sin embargo, no podemos olvidar las zonas de Utrera-Lebrija, Los Puertos, Cádiz, Córdoba…

En Jerez siempre han destacado las personalidades de Rafael Ramos “El Niño Gloria”, y su hermana “La Pompi”. El primero tuvo tal importancia en relación con el villancico flamenco, que incluso popularizó una forma -creo que heredada- de abordar este canto navideño a través de las bulerías uniéndole un estribillo muy pegadizo, en el que se repite con insistencia la palabra “gloria”, la cual acabaría dándole su apelativo artístico, y que, posteriormente, sería adoptada por la mayoría de los cantaores jerezanos, llegando incluso a crear una escuela en la que abundaron seguidores de la talla de ‘Canalejas’, Manuel Soto “Sordera”, “Chano Lobato” y otros cantaores actuales. Tampoco hay que olvidar a otro de los inigualables genios de este arte también de Jerez como fue “Manuel Torre”, el cual desarrolló una creatividad sin par al aflamencar los campanilleros de ‘La Aurora’.

Y, en nuestra tierra, la popularización del villancico se debe a ‘Canalejas de Puerto Real’. Posteriormente –aparte del citado Rafael Romero- fue Rosario López, junto con Manolo ‘Canalejas’, los continuadores de la tradición flamenca de estos cantes, y últimamente Eduardo Martínez ‘Niño Jorge’.


Rafael Valera Espinosa

lunes, 12 de febrero de 2018

Por soleá. SANA ENVIDIA FLAMENCA.

He de pedir perdón a los aficionados y lectores de mi columna, por la de hoy, pero es que a veces el ‘corta-pega’ es más impactante y resolutivo que cualquier rebuscado texto sobre el tema que yo pudiera elaborar. Lean:

El flamenco sigue dando pasos adelante para integrarse en los planes de estudio oficiales. El proyecto pionero que pusieron en marcha la Fundación Cristina Heeren y el IES Carmen Laffón de San José de La Rinconada inaugura su tercer curso, con un renovado convenio de colaboración a tres años respaldado por el Ayuntamiento de La Rinconada. En total, 50 estudiantes de Bachillerato de Artes Escénicas, con edades comprendidas entre los 16 y los 22 años, participan en esta formación impartida por profesores de la Fundación que, a lo largo de 22 años, han recibido 6.000 alumnos andaluces, españoles e internacionales, entre ellos jóvenes artistas del prestigio de Rocío Márquez, Argentina, Manuel de la Luz o El Choro. El programa contempla asignaturas de Baile, Cante, Guitarra, Compás y Teoría del Flamenco.”

Más:

La Diputación de Córdoba comienza este mes de marzo la tercera edición de su programa Flamenco en tu aula, con el que llegará a 48 centros públicos de 28 municipios. Según ha explicado Marisa Ruz, delegada de Cultura de la institución provincial, "vamos a llegar prácticamente a todos los pueblos, pues hemos incrementado los colegios en un 10% más". Ruz ha señalado que el programa ha sido un éxito en los años anteriores, por la implicación de los alumnos y los profesores. Con este programa educativo "tratamos de potenciar el flamenco, porque lo sentimos nuestro" y con él se complementa otros programas como el de Jóvenes Flamencos o el circuito provincial de cultura. Del mismo modo, la responsable del área de Cultura ha resaltado que Flamenco en tu Aula es un proyecto que ofrece gratuitamente la Diputación de Córdoba a los centros educativos y que se basa en un concierto pedagógico de una hora”

Y, por último:

La cantaora y educadora sanluqueña Laura Vital, la primera profesora de cante jondo en la enseñanza pública en Andalucía, imparte en Jerez la ponencia 'El flamenco en la escuela'.” "Voy a contaros lo poquito que yo sé sobre el flamenco y la educación, que son dos palabras tan grandes donde una siempre es aprendiz". Así inicia la sanluqueña, de 37 años, su ponencia” Y a la pregunta ¿cómo le definiría el flamenco a un niño de ocho años? responde: “Le intentaría decir que el flamenco es la música que nos representa en todo el mundo. Que somos afortunados por tener una música tan rica, mezcla de tantísimas músicas y civilizaciones, de muchas culturas que han pasado por aquí... Les diría lo orgullosos que tienen que sentirse por haber nacido en la tierra donde se crea el flamenco. Un arte y una música pasional, salvaje, rica por darse en Andalucía.”

¿Tan trasnochados estamos el resto de provincias? ¿Tomaremos interés alguna vez? ¡Donde estará nuestro loro!

Rafael Valera Espinosa


jueves, 8 de febrero de 2018

Por soleá. EL FESTIVAL DE PEGALAJAR CUMPLE 50 AÑOS.

No conocí las primeras ediciones del más popular de los festivales flamencos de nuestra provincia por su antigüedad, pues solo tenía 18 años y para poder asistir a dichos acontecimientos había que poseer vehículo o amigos que lo tuvieran –no todos eran ni son aficionados-, permiso paterno y, sobre todo, economía para solventar el desplazamiento y los gastos complementarios. Tampoco estaba totalmente subyugado por nuestro arte, a pesar de servir de especialista de sonido y control para grabar los programas sobre flamenco de Fernando Arévalo con Fernando Pérez Mesa ‘Canalejas hijo’, en ‘La Voz de Jaén. Emisora Sindical’.

Presentación 49 festival flamenco de Pegalajar (Verano 2017)
El Festival Flamenco de Pegalagar se institucionalizó un agosto de 1968 siguiendo las estelas de los exitosos ‘Potaje de Utrera’ (1957); Concurso Nacional del Cante de Las Minas en La Unión (1961); Festival Flamenco de Mairena del Alcor (1962), aunque desde mediados de los cincuenta se celebraban fiestas flamencas con Antonio Mairena en la festividad de San Bartolomé; Concurso Nacional de Tarantas de Linares (1962) ‘Caracola de Lebrija’ (1965); Festival Flamenco de Música y Danza en el ‘Paseo de los Tristes’ (1965) ‘Gazpacho de Morón’ (1967), etc. Y se creó gracias a un entusiasta colectivo de aficionados pegalajeños capitaneados por Luis Chica, al que luego se unirían el jiennense José Solís Rostaing, el pintor Miguel Ayala, el jovencísimo Pedro León, etc.

Su historia está plagada de grandes momentos flamencos. Me contaba uno de sus presentadores más añejos, Juan Antonio Ibáñez, que en un primer tiempo la Peña de Pegalajar se denominó ‘Peña Flamenca Miguel Hernández’, y que por este motivo el granadino Enrique Morente cantó –creo que por peteneras- ‘Andaluces de Jaén’ en el festival del año 1971.

Por el escenario de ‘La Charca’ han pasado los más prestigiosos artistas de los últimos 70 años de la historia de nuestra música: ‘Antonio Mairena’ y sus hermanos ‘Curro’ y Manolo, ‘Terremoto de Jerez’, ‘Fosforito’, Rafael Romero, ‘Fernanda y Bernarda de Utrera’, José Menese, Diego Clavel, ‘La Perrata de Utrera’ y sus hijos ‘El Lebrijano’ y Pedro Peña, Calixto Sánchez, ‘Camarón de la Isla’, dos jovencísimas cantaoras como Rosario López y Carmen Linares arropadas por Rafael Romero, ‘La Niña de la Puebla’, José Mercé… Es decir, toda la mejor nómina de artistas habidos desde la fundación del festival.

Recuerdo las anécdotas que me contaba mi entrañable y desaparecido amigo Martín García Ruíz cuando acompañaba a Luis Chica y las vicisitudes que a veces vivían por culpa de los artistas, obligándoles según contrato a salir de nuevo en la segunda parte.

Igualmente, siempre mantendré en mi memoria la impresión que me causó ver bailar por primera vez a la impar gitana sevillana Manuela Carrasco, y como ‘La Perrata’ la jaleaba desde detrás del escenario. O la sorpresa que me llevé cuando anunciaron al maestro de profesionales del baile como era Enrique ‘El Cojo’, bailar con magnificencia, poderío y profesionalidad por alegrías, teniendo un pie más corto que otro.

¡Larga vida al festival pegalajeño!


Rafael Valera Espinosa

martes, 6 de febrero de 2018

Memoria flamenca. MARIANA CORNEJO SÁNCHEZ ‘MARIANA DE CÁDIZ’ (y III).

¿HABRÁ COSA MÁS MELODIOSA, PROFUNDA Y BONITA QUE LA MALAGUEÑA DE ‘EL MELLIZO’?

Después de relatarme sus vivencias y éxitos artísticos, mi conversación con ‘Mariana de Cádiz’ derivó a los aspectos más específicos de su forma de entender y realizar el cante flamenco. Ya ha quedado relatado en las dos anteriores entregas que su arte estaba influenciado por Pastora Pavón Cruz ‘Niña de los Peines’, también por Antonia Gilabert Vargas ‘La Perla de Cádiz’, por Francisca Méndez Garrido ‘La Paquera’, y por ‘Fernanda de Utrera’, principalmente por ser mujeres cantaoras, sin olvidar a su tío Juan Pérez Sánchez ‘Canalejas de Puerto Real’, así como tampoco a los grandes propagadores del arte gaditano del siglo XX como fueron Aurelio Sellé Nondedeu ‘El Tuerto de Cádiz’, Manolo Vargas Gómez ‘Manolo Vargas’, Juan Martínez Vílchez ‘Pericón de Cádiz’, y Juan Manuel Ramírez Sarabia ‘Chano Lobato’.

Como a la mayoría de los artistas referidos, a ‘Mariana de Cádiz’ también se le ha reconocido sus virtudes cantaoras por la malagueña de Enrique ‘El Mellizo’, los tientos-tangos de su tierra, las cantiñas-alegrías, las bulerías, los tanguillos gaditanos, y hasta la chuflas de Cádiz. Sin embargo, los maestros arriba citados igualmente eran dominadores de los cantes de fragua (tonás, martinetes, deblas y carceleras), las siguiriyas, soleares, etc. Y este fue el camino a seguir en mi entrevista con nuestra protagonista gaditana.

Pregunta: Olvidándonos de los estilos festeros ¿cómo tocas tú los serios?

Respuesta: - “A mí me gusta mucho la soleá de mi tierra… Con ese remate arriba… Hay que tener las facultades muy claras, si no es que no puedes con ella. ¿Y la malagueña de ‘El Mellizo? ¿Habrá cosa más melodiosa, profunda y bonita? ¿Y la caña de ‘Curro Dulce’?... Cádiz tiene muchas cosas. Lo que pasa es que como soy muy alegre no siempre toco los estilos serios.”

P: ¿Se está acabando la cantera de artistas en Cádiz?

R: - “¡No sé qué decirte! Pero verás tú… Acabarse no se puede acabar. En Cádiz hay buena gente cantando. Lo que les pasa es que una vez que empiezan, luego no se deciden a seguir. Y sucede también que los que suenan y actúan fuera somos muy pocos.”

P: ¿Habría que enfocar el cante como el de ‘Niña Pastori’?

R: - “¡No! ¡No! Porque la Niña canta flamenco que quita el sentío. Lo que pasa es que a esa criatura se le ha venío esa oportunidad y, con ese aire flamenquito que tiene –que a mí me encanta- que tanto le gusta a la juventud, además de darle fama, le da dinero… Pues yo lo veo estupendamente. Eso, desde luego no es el flamenco del que nosotros hablamos, pero a ella se lo han impuesto y lo hace bien ¡Pues mira…!”

P: ¿Es ese el futuro del flamenco?

R: - “¡Ay! Yo no creo que ese sea el futuro del flamenco… ¡Por favor! Porque esa malagueña, esa siguiriya, esos tarantos, esas soleares… Todo eso no se puede perder jamás. Además está saliendo mucha gente buena y por eso este cante nuestro nunca puede desaparecer. Lo que pasa es que estamos en la hora nueva –diremos- de estas cosas musicales que suenan muy bonito, porque es bonito y a mí es a la primera que le gustan, y la gente está deseosa de alegrías y cosas así.”

P: ¡Pero son este tipo de artistas los que llenan los festivales y no los cantaores por derecho!

R: - “¡Eso no puede ser! En los festivales no deben de faltar los auténticos artistas flamencos. Esta clase de recitales hay que organizarlos de otra forma, en otro tipo de recintos y darle otro nombre. No sé… ¡Llamarlos ritmos flamencos! También quiero decirte que esto puede ser un acierto, porque por este tipo de cante puede que se atraiga a gente que luego consideren y disfruten con el auténtico arte flamenco.”

P: ¿Los nuevos instrumentos que acompañan al flamenco tienen razón de ser?

R: - “A mí no me gustan. Cuando yo grabé mi segundo disco me dijeron que lo escuchara para ver qué me parecía. Me quedé pasmá porque no sabía que le habían metio música. Yo ignoraba que me habían hecho esos arreglos, que por cierto sonaban muy bien, bonitos y me gustaron. ¡Ahora…! ¿En un escenario…? ¿En un festival? ¡Mi guitarra, mis palmas y yo…! Y punto.”

P: ¿Cuál es el cante que más te gusta?

Mariana Cornejo acompañada por Pascual de Lorca
(foto: Pepe Pamos)
R: - “Yo te juro que me gustan toos los cantes; pero hay uno en particular que me gusta con delirio: la siguiriya. Después, por ser muy alegre y festera, me gustan los cantes de ritmo y compás. Y esto último creo que es porque mi tierra lo da.”

Muchos aficionados y lectores recordarán que ‘Mariana de Cádiz’ protagonizó un anuncio de lejía en la televisión andaluza. Y claro, la pregunta creí que era bastante oportuna.

P: ¿Da más popularidad un anuncio en televisión que un disco flamenco?

R: - “Puesssss… ¡Yo creo que sí! La popularidad que te da el que te vea tantísima gente a la vez y tantas veces, es mucho más grande que la que te da un disco. Lo cierto es que un disco flamenco y tus actuaciones, si son buenas, propician que te llamen para el anuncio. Pero la popularidad que da la televisión es incomparable. Hasta el punto de que a mí me paran por la calle hasta los niños. Pero lo mismo en Cádiz que en Sevilla o Málaga, o en otra ciudad.”

P: ¿Puede producir eso tristeza en un cantaor flamenco?

R: - “A mí no, porque yo nunca he dejao lo mío ni lo pienso dejar. Y si me dijeran que me fuera a hacer teatro o televisión, como sabes que lo he hecho, y que dejara el flamenco, yo nunca dejaría el flamenco. Es indiscutible que una pantalla te da mucha popularidad, pero amigo, este arte que nosotros interpretamos es único, y los que tenemos la suerte de poder desarrollarlo, nunca podemos abandonarlo.”

Mariana Cornejo vino tres veces a la Peña Flamenca de Jaén. La primera en abril de 1993, en la que demostró su conocimiento por cantiñas-alegrías, taranta de Linares y taranta-levantica, bulerías, fandangos de ‘El Almendro’ (tío de ‘Caracol’), tientos y tangos, más bulerías y canciones por el estilo, y tanguillos de Cádiz.

Rafael Valera Espinosa